Los bonobos compensan la deficiencia de yodo comiendo estas plantas acuáticas

Para compensar la deficiencia de yodo en su dieta, los bonobos que habitan en la parte central de la cuenca del río Congo, comen plantas acuáticas, de acuerdo con un artículo publicado en BMC Zoology. Resultó que los nenúfares que crecen en las zonas pantanosas contienen el nivel suficiente de yodo para que los animales crezcan, se desarrollen y se reproduzcan normalmente, según recoge la autora original de este artículo Yana Bermán en N+1y comparte Paula Dumas para Periodista Digital

¿Por qué necesitamos el yodo?
El yodo es necesario para la síntesis de hormonas tiroideas, que se producen en la glándula tiroides y regulan muchos procesos en el cuerpo. Entre otras cosas, participan en la regulación del crecimiento de un organismo, el metabolismo y afectan a la síntesis de proteínas.

La falta de yodo en los niños conduce al desarrollo de deficiencia congénita de la glándula tiroides, lo que provoca un retardo en el crecimiento físico y mental. En los adultos, la carencia de yodo puede causar hipotiroidismo o la enfermedad de Graves-Basedow.

Para mantener el nivel requerido de yodo en el cuerpo, se recomienda comer pescado y mariscos, así como plantas marinas, como algas. Las personas que viven en las regiones lejanas del mar normalmente consumen sal yodada. Pero en la antigüedad no había fuentes artificiales de yodo, por eso las personas que vivían lejos del mar tenían que buscar otras soluciones. Por ejemplo, los pigmeos efé viven en la parte central de la cuenca del Congo, donde hay pocas fuentes naturales de yodo.

Según los estudios recientes, estas poblaciones están genéticamente adaptados al bajo contenido de yodo en su organismo. Es probable que otros pueblos indígenas de los bosques de África Central se adapten a la deficiencia de yodo de la misma manera.

Cómo los bonobos resuelven el problema con yodo
Gottfried Hohmann del Instituto Max Planck de Antropología Evolutiva y sus colegas de Alemania y Reino Unido decidieron averiguar cómo las poblaciones antiguas de cazadores-recolectores, que aparecieron en la cuenca del Congo mucho más tarde que los pigmeos, se adaptaron a la deficiencia de yodo. Los científicos eligieron los bonobos que viven en la cuenca del Congo y estudiaron su dieta.

Según los autores del estudio, la alimentación de las personas antiguas y los monos que viven en esta zona son bastante similares. Esos animales comen hojas, frutos, semillas, plantas acuáticas y raíces. También pueden alimentarse de insectos y cazan periódicamente vertebrados.

Al igual que los humanos, necesitan yodo. Puesto que los bonobos no tienen enfermedades causadas por su deficiencia, los científicos supusieron que reciben ese micromineral de algún tipo de comida.

Durante dos años, los científicos observaron dos bonobos en el parque nacional de Salonga, en la República Democrática del Congo para comprender qué plantas comen los monos y con qué frecuencia. Además, los investigadores analizaron la composición de 11 plantas: las hierbas que crecen en el agua y en la tierra, hojas de uva y árboles y frutas.

Juncos y loto tigre
Resultó que la mayor cantidad de yodo se encuentra en los tallos de Nymphaea lotus, una planta acuática que se conoce como loto tigre. En promedio contiene 7.55 miligramos de yodo por kilogramo. En las hojas del mismo nenúfar había menos yodo, un promedio de 1.14 miligramos por kilogramo. También se encontró una cantidad aún menor (0.33 miligramos por kilogramo) en una planta llamada junco que crece en lugares pantanosos. En cuanto a otras plantas, el contenido de yodo era inferior a 0,1 miligramos por kilogramo.

Al mismo tiempo, los investigadores notaron que los bonobos visitaban aproximadamente una vez cada dos semanas estanques y pantanos donde crecían esas plantas. Quedaban allí por varias horas y buscaban solo dos plantas, el loto tigre y diferentes tipos de juncos. Es curioso que tiraban las hojas y las flores y consumían solo los tallos que crecen bajo el agua, ricos en yodo. En cuanto a junco, comían solo al núcleo de los tallos.

Los autores del estudio creen que con la ayuda de plantas acuáticas, los bonobos compensan la deficiencia de yodo. Es posible que las personas antiguas que emigraron a esta zona incluyeran plantas acuáticas en su dieta.

¿Y qué hacen los chimpancés?
Hace unos años, los científicos descubrieron que los chimpancés también comen plantas acuáticas. Prefieren algas Spirogyra, ricas en calcio, magnesio y antioxidantes, y las atrapan con palos. Además, recientemente científicos registraron el primer caso oficial de chimpancés comiendo cangrejos de agua dulce en la jungla de Guinea.